29 de octubre de 2016

teatro bretón de los herreros, logroño


El 19 de septiembre de 1880 se inaugura el teatro, precisamente con la representación de diversas obras de Bretón de los Herreros, teniendo 700 plazas y siendo la disposición de la sala en forma de herradura con tres niveles de palcos en todo su perímetro.
En la historia del teatro ocupa un lugar importante el hecho de que en él se realizara el 18 de noviembre de 1896 la primera proyección cinematográfica en Logroño. 

hotel marqués de vallejo, logroño








monumento a espartero, plaza del espolón, logroño


iglesia de santiago el real, logroño

La iglesia de Santiago el Real constituye una de las paradas de los peregrinos. Fechado en el siglo XVI, es el templo más vinculado a la ciudad. En él se reunía el concejo municipal y se guardaba el archivo. La fachada, concebida a modo de arco del triunfo (siglo XVII), está decorada con dos esculturas del santo, uno con hábitos de peregrino y un Santiago Matamoros.
Junto a la iglesia encontramos la fuente de Santiago, también llamada «de los peregrinos», ya que aquí podían pararse a descansar y refrescarse.

iglesia de san bartolomé, logroño



La iglesia de San Bartolomé es la más antigua de Logroño. Construida en sillería, posee el alzado del siglo XII, conserva el ábside central semicircular y la decoración de los capiteles propia de las iglesias del camino. Destaca la portada gótica ojival cuidadosamente labrada. Su torre formaba parte del sistema defensivo de la ciudad, era parte de la muralla y fue elevándose a medida que el casco urbano se ampliaba. Así, los dos primeros cuerpos de la torre son de sillería, como la iglesia y la muralla, y los dos siguientes de piedra, decorados con pequeños azulejos mozárabes.

28 de octubre de 2016

concatedral de santa maría de la redonda, logroño




La concatedral de Santa María de la Redonda está situada en una de las arterias principales de la ciudad, la calle Portales, edificada sobre un oratorio del siglo XII. Se comenzó a construir en el XV, y las ampliaciones y remodelaciones se continuaron hasta el XVIII. La fachada principal está labrada a modo de retablo y cerrada por una gran reja de hierro forjado. Las torres, conocidas como «las gemelas», ejemplo del barroco riojano, están vinculadas con otras de La Rioja por su tracista: Martín de Beratúa.
Está dividida en tres naves separadas por grandes columnas cilíndricas y girola. Los elementos más representativos son un cuadro de la crucifixión de Cristo, atribuido a Miguel Ángel; el sepulcro del General Espartero y su mujer, Doña Jacinta Martínez de Sicilia; las rejas que cierran las capillas laterales, por su excepcional trabajo de forja y talla; y el Santo Sepulcro, ubicado en la capilla de Nuestra Señora de los Ángeles, elaborado en carey, filigrana de plata y madera.

san millán de la cogolla



20 de octubre de 2016

monasterio de yuso, san millán de la cogolla














Declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO por ser cuna del castellano.
El origen de la construcción del monasterio se refleja en una leyenda que narra como el rey García, el de Nájera, ordenó el traslado de los restos de San Millán que se encontraban en Suso al monasterio de Santa María La Real de Nájera. Los bueyes que tiraban de la carreta se detuvieron el valle como si los restos del Santo no quisiesen abandonarlo construyendo en ese lugar el actual monasterio de Yuso. Un monasterio románico de los siglos X y XI del que en la actualidad no queda ningún resto, sobre el que se construyó entre los siglos XVI y XVIII el actual monasterio de Yuso por los abades benedictinos. Los monjes benedictinos se trasladaron al monasterio en el siglo X. Uno de los abades más relevantes fue Domingo, natural de la población riojana de Cañas, más conocido como Santo Domingo de Silos.
La portada de acceso al monasterio se realizó en 1661 y en ella aparece el relieve de San Millán “Matamoros” ya que según la tradición combatió al islam junto con Santiago en la batalla de Simancas. El zaguán se hizo poco más tarde en 1689, todo ello da acceso al Salón de los Reyes llamado así por los cuatro grandes lienzos de reyes bienhechores del monasterio.
El claustro bajo se comenzó en 1549 y aunque sus bóvedas son góticas la concepción es renacentista. El superior es clasicista y contiene veinticuatro cuadros de José Vexes, cuyas escenas principales versan sobre la vida de San Millán, escrita por San Braulio, Arzobispo de Zaragoza.
La sacristía es una de las más bellas de España, antigua sala capitular comenzó a usarse como tal hacia 1693. Los frescos del techo del siglo XVIII conservan sin haber sido restaurados toda la riqueza del color original. La cajonería es de madera de nogal, encima de la cual hay veinticuatro óleos sobre cobre de estilo barroco de procedencia flamenca, madrileña e italiana.
La iglesia del monasterio es lo primero que se hizo de todo este conjunto, comenzada en el año 1504 se terminó treinta seis años después, está catalogada dentro del gótico decadente. El grandioso retablo del altar mayor contiene un lienzo de Fray Juan Ricci, de la escuela del Greco, que representa a San Millán a caballo en la batalla de Hacinas. La extraordinaria rejería de Sebastián de Medina de 1676 completa el conjunto artístico de la capilla mayor.
La sillería de coro bajo fue realizada por un tallista flamenco en torno a 1640, el trascoro de estilo rococó francés está decorado con esculturas de bulto redondo que representan a discípulos de San Millán, destacando por su belleza el púlpito plateresco decorado con relieves de los evangelistas y símbolos de la pasión. El coro alto, algo posterior al bajo, está sostenido por un arco con dieciséis medallones, de la primera mitad del siglo XVII.
La estantería de los cantorales del monasterio conserva en su haber veinticinco volúmenes copiados entre 1729 y 1731. El archivo y biblioteca monasterial de gran valor para los investigadores está considerado entre los mejores de España; en él se guardan dos cartularios y trescientos volúmenes originales.
En la sala de exposiciones resaltan las réplicas de los marfiles románicos de las arquetas: relicarios de San Millán del siglo XI y de San Felices del siglo XII.
Fue construido por monjes benedictinos, que permanecieron en él hasta la desamortización y exclaustración del XIX. Actualmente los frailes Agustinos Recoletos son los que mantienen vivo el espíritu del monasterio.

3 de octubre de 2016

monasterio de santa maría la real de nájera










La majestuosidad del Monasterio de Santa María la Real, que destaca por su magnífico claustro de los Caballeros del siglo XVI donde se alternan los estilos gótico, plateresco y renacentista.
El monasterio fue fundado por el rey Don García Sánchez III “el de Nájera” y su esposa Doña Estafanía de Foix que lo mandaron construir en 1052. El origen de su fundación se pierde en la leyenda que relata cómo el monarca encontrándose de cacería persiguió a su presa hasta una cueva donde encontró una misteriosa imagen de la Virgen y junto a ella un jarrón de azucenas, una campana y una lámpara. Tiempo más tarde el rey reconquistó la población riojabajera de Calahorra a los musulmanes y construyó el monasterio de Santa María La Real como una ofrenda a la Virgen que le había ayudado. A su vez instituyó la Orden Militar de los caballeros de la Terraza o de la Jarra, una de las órdenes más antiguas de España.
En 1079 Alfonso VI de Castilla incorporó a la orden benedictina de Cluny el monasterio junto al grupo de clérigos que lo habitaban desde su fundación, en el que permanecieron hasta la desamortización de Mendizábal en el 1835. Desde 1895 es una comunidad de frailes Franciscanos quien rige el monasterio.
La actual iglesia del monasterio data del 1516, consta de tres naves y crucero. La cueva primitiva en la que la leyenda sitúa la aparición de la Virgen se encuentra a los pies de la nave, la imagen que la preside es la de Ntra. Señora de la Rosa, de comienzos del siglo XIV. En su entrada se encuentra el Panteón Real que alberga doce sepulturas de dos dinastías: la de “los Abarca” o “Jimena” de los siglos X y XI y la dinastía de García Ramírez “el Restaurador”, siglos XII y XIII, frente a ellos cabe destacar el sepulcro de Doña Blanca de Navarra que constituye una verdadera joya románica del siglo XII.
El retablo de la capilla mayor es de finales del siglo XVII, de estilo barroco, sobresale en el centro la talla románica de Santa María La Real sosteniendo al niño en su rodilla izquierda.
El coro de principios del siglo XVI es de estilo Reyes Católicos y en él se puede apreciar la influencia de la última época del gótico y comienzo del renacimiento. La sillería tallada en madera de nogal es una obra maestra del gótico florido, en la silla abacial podemos admirar la figura policromada del rey Don García.
El claustro se empezó a construir a principios del siglo XVI, conocido como Claustro de los Caballeros ha sido durante siglos lugar de enterramiento de muchos nobles. Cabe destacar entre todos, el sepulcro de don Diego López de Haro con su escultura yacente del siglo XIII y a sus pies el sarcófago gótico de su esposa doña Toda Pérez de Azagra. La mezcla armónica de estilos como el gótico florido de las bóvedas y el plateresco de las tracerías caladas han dado lugar a una sorprendente obra arquitectónica digna de ser visitada.