4 de enero de 2016

monasterio de san juan, poio


La tradición fija el siglo VII como posible fundación del monasterio, y atribuye la misma a San Fructuoso. Aunque sus orígenes nos son desconocidos se sabe, en todo caso, que ya existía en el año 942, gozando de notable protagonismo, especialmente en los siglos XVI y XVII.
En 1835 los monjes benedictinos abandonan el Monasterio de Poio por causa de la ley de desamortización y medio siglo después, concretamente en 1890 llegan hasta aquí los religiosos de la Orden de la Merced.
El Claustro de las procesiones es una obra magnífica del S. XVI del arquitecto Ruiz de Pama-mes y del maestro Mateo López. Tiene arcos redondos y bóvedas de crucería que arrancan de ménsulas en forma de mascarones empotradas en los muros. 
La iglesia es de renacimiento puro, con elementos barrocos en las balaustradas del coro. Este último, sostenido por un amplio arco. En el punto central de la bóveda del crucero destaca un excepcional florón en donde esta labrada la fecha de 1708, año en que remataron las obras de edificación del templo. El pavimento de la iglesia, del año 1776, servía antiguamente para dar sepultura a los feligreses, de ahí que sus piedras estén numeradas perfectamente cuadriculadas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario