El
Ayuntamiento de Cádiz se localiza en el emplazamiento actual desde el siglo
XVI. A finales del siglo XVII se reformó el edificio, que fue sustituido por el
actual a partir de 1799.
La
obra responde a proyectos de Pedro Ángel Albisu y Torcuato Benjumeda, en los
que se sigue la estética academicista imperante en la época, completándose el
conjunto en 1865 por Manuel García del Álamo. La fachada se eleva sobre un
pórtico avitolado, sustentado por arcos de medio punto y está centrada por una
gran balconada con columnas jónicas de orden gigante, rematada por frontón
triangular en el que destaca el relieve de Hércules, fundador mítico de la
ciudad. La torre reproduce los rasgos de la situada en el edificio anterior,
obra de tres cuerpos de estilo manierista. El primero de ellos es de planta
cuadrada, a cuyos lados se levantan las estatuas de los patronos de la ciudad,
San Servando y San Germán. Sobre éste va otro de planta octogonal, rematado por
un templete sustentado por columnas jónicas y cúpula semiesférica dónde se
sitúa la campana. Toda la fachada del edificio está decorada con diversos
elementos que aluden a la historia y al carácter comercial de la ciudad.
En
el interior, las dependencias se organizan en torno a un patio de planta
cuadrada. Al patio se abre una escalera de tipo conventual, fechada, al igual
que el primer cuerpo del patio, a finales del siglo XVII. En una de las crujías
del patio existe una escultura en mármol blanco que representa a Hércules, y
que formaba parte de la que fuera única fuente de la ciudad.